Nueva fuga de dos jóvenes de un instituto de menores en la localidad de Azul
Desde aquella fatídica semana santa de 1987, cuando el presidente Raúl Alfonsín acuñó la frase que quedó grabada en la memoria de una sociedad que estuvo en vilo por el levantamiento carapintada, han pasado treinta y siete años. Sin embargo, hoy la sociedad es presa del pánico por otro mal endémico: la delincuencia juvenil.